En la Exposición Internacional de Milán, dedicada a la comida, se encuentra un supermercado en el que los visitantes podrán comprar todo tipo de alimentos. Se trata de un supermercado real en el que los productos, unos 1 500, se encuentran bajo una pantalla digital en la que aparecen fijados todos los datos del alimento elegido como su origen, por ejemplo.
En estas pantallas podrán verse además otros datos como la huella ecológica del alimento, su valor nutricional o incluso algunas recetas.
Se trata de un experimento llevado a cabo por el gigante italiano de los supermercados COOP y el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
“Este experimento funciona. Aquí también vendemos los productos así que podría funcionar en un supermercado normal, asegura Marco Pedroni, presidente de COOP Italia. Nos gustaría probar durante seis meses más este sistema para estudiar todos los detalles y decidir después si podemos aplicarlo en nuestra empresa. Pero yo creo que en el futuro esto existirá. No se trata solo de tecnología. Se trata de convertir el consumo en algo más social, más responsable y sobre todo más sostenible”.
Varios robots de última generación dotados de siete articulaciones independientes son también el corazón de este nuevo supermercado. No remplazan a los humanos, aseguran los responsables del proyecto, pero ayudan a los clientes a elegir los productos y garantizan el abastecimiento de algunas secciones.
Los supermercados evolucionan de esta manera gracias a las nuevas tecnologías convirtiéndose en lugares en los que los clientes podrán, en un futuro no tan lejano, encontrar toda la información necesaria sobre el producto que han elegido.
Fuente: appy-greek.com
