Por costumbre, antes de dormirnos buscamos un vaso de agua y lo dejamos amanecer al lado de nuestra cama. Debido a que en la noche nuestro cuerpo enfrenta el ayuno mas prolongado que hacemos en todo nuestro día. No solamente consumimos nuestros carbohidratos, grasas y proteínas, sino que también consumimos el agua almacenada en nuestro cuerpo.
Al despertarnos, nuestro cerebro tiene dos grandes mandatos para nuestro organismo, el primero es expulsar todos los desechos líquidos acumulados en nuestra vejiga y el segundo es reponer todo ese liquido que fue consumido durante la noche y es en este momento donde cometemos EL PELIGROSO ERROR de extender nuestro brazo hacia la mesa de noche y tomar el vaso de agua que amaneció junto a nosotros.
Según un estudio realizado por el Dr. Kellogg Schwab director de Johns Hopkins University Water Institute este vaso de agua que se mantiene toda la noche a la intemperie con una temperatura ambiente, es atacado por un sin numero de bacterias durante toda la noche, que inclusive en el caso de agua tratada que contiene cierta cantidad de cloro no puede contener. Al día siguiente el agua sigue siendo apta para el consumo humano, pero ya no será solo agua. Ahora será un CÓCTEL DE GERMENES que pueden causas todo tipo de afecciones.
Otro caso también explicado por el director del Johns Hopkins University Water Institute, es el la botella de agua plástica que dejamos abandonada en nuestros vehículos y que se exponen a altas temperaturas durante un periodo de tiempo prolongado. En este caso las botellas de agua plástica contiene un químico llamado BPA, este componente es tóxico y solo se libera al exponerse el plástico a altas temperaturas. Este químico interrumpe el funcionamiento optimo de las hormonas es por ello que los biberones de bebes no contienen BPA para poder ser esterilizados.
Nuestro cuerpo necesita de un mínimo de 8 vasos de agua al día, pero no cualquier tipo de agua. Cuando vayas a tomar agua intenta que la misma sea libre de germenes y de BPA, así evitas problemas renales y complicaciones hormonales tal como hipotiroidismo e hipertiroidismo.
Fuente: Iremedios.com
Al despertarnos, nuestro cerebro tiene dos grandes mandatos para nuestro organismo, el primero es expulsar todos los desechos líquidos acumulados en nuestra vejiga y el segundo es reponer todo ese liquido que fue consumido durante la noche y es en este momento donde cometemos EL PELIGROSO ERROR de extender nuestro brazo hacia la mesa de noche y tomar el vaso de agua que amaneció junto a nosotros.
Según un estudio realizado por el Dr. Kellogg Schwab director de Johns Hopkins University Water Institute este vaso de agua que se mantiene toda la noche a la intemperie con una temperatura ambiente, es atacado por un sin numero de bacterias durante toda la noche, que inclusive en el caso de agua tratada que contiene cierta cantidad de cloro no puede contener. Al día siguiente el agua sigue siendo apta para el consumo humano, pero ya no será solo agua. Ahora será un CÓCTEL DE GERMENES que pueden causas todo tipo de afecciones.
Otro caso también explicado por el director del Johns Hopkins University Water Institute, es el la botella de agua plástica que dejamos abandonada en nuestros vehículos y que se exponen a altas temperaturas durante un periodo de tiempo prolongado. En este caso las botellas de agua plástica contiene un químico llamado BPA, este componente es tóxico y solo se libera al exponerse el plástico a altas temperaturas. Este químico interrumpe el funcionamiento optimo de las hormonas es por ello que los biberones de bebes no contienen BPA para poder ser esterilizados.
Nuestro cuerpo necesita de un mínimo de 8 vasos de agua al día, pero no cualquier tipo de agua. Cuando vayas a tomar agua intenta que la misma sea libre de germenes y de BPA, así evitas problemas renales y complicaciones hormonales tal como hipotiroidismo e hipertiroidismo.
Fuente: Iremedios.com